¿Made in USA? No, thanks

Si Estados Unidos tiene tecnología y equipamiento para evitar que sigan matando a policías y a soldados mexicanos, "yo la compro, la quiero, si me la regalan, mejor. No encuentro el ataque a la soberanía", nos comentó hace poco Ricardo García Cervantes.
Hablábamos de las señales que apuntan hacia el incremento de la cooperación de Estados Unidos en el sangriento combate al narcotráfico. El senador panista no ocultaba su desconcierto por el nacionalismo a rajatabla que muestran algunos sectores de la izquierda mexicana, capaces de renunciar a cualquier tipo de ayuda, si esta viene con la marca USA.
A propósito de cooperación con los vecinos del norte, ayer se dio a conocer que el presidente Calderón se reunirá, en Quebec, Canadá, con George Bush y el primer ministro de aquel país, Stephen Harper. El encuentro se dará en la Cumbre de Líderes de América del Norte, el 20 y el 21 de agosto próximo. Tratarán temas trilaterales, en el marco de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte, que es vista con desconfianza por los legisladores de izquierda.
En este espacio hemos aplaudido la determinación mostrada por Marcelo Ebrard de hacer valer la ley en Tepito y recuperar el espacio para sus habitantes. El barrio bravo, todos los sabemos, es bastión de la piratería, el contrabando y el narcomenudeo.
Ahora tenemos que condenar al jefe de Gobierno del DF por la blandengue postura frente a los bloqueos de los maestros de la CNTE. Los ha dejado hacer y deshacer, con el argumento de que "no estamos a favor de reprimir a la gente". Sustenta su postura en el hecho de que los maestros ya retiraron las construcciones fijas que empezaban a edificar en Avenida de la República, como si eso resolviera la cascada de problemas que derivan de los bloqueos.
"Creo en el diálogo, la firmeza, no en el abuso", dijo Marcelo, en su perorata para justificar la mano blanda ante los desmanes de los maestros en esta castigada ciudad, rehén de todas las causas. Habría que preguntarle si lo que hacen los radicales mentores no constituye un abuso.
En el noticiario radiofónico de Joaquín López-Dóriga incluso sostuvo que no existe ley que prohíba los bloqueos. O sea, pueden bloquear las vías primarias, el tiempo que se les antoje —el jueves lo hicieron durante tres horas y media con el Paseo de la Reforma—, y no ocurre absolutamente nada. ¿Y el derecho al libre tránsito, consagrado por la Constitución?, ¿no es ley? ¿Y el artículo 25 de la Ley de Cultura Cívica, que va en el mismo sentido? ¿Y el derecho que tienen los demás a llegar a tiempo a sus trabajos?
Ya encarrerado, Marcelo le dijo a Joaquín que el famoso Bando 13, expedido por su jefe, Andrés Manuel López Obrador, "no tiene fuerza de ley". Éste prohíbe manifestaciones que desquicien el tráfico, eleven la contaminación y afecten el libre tránsito de terceros.
Marcelo, por cierto, se negó a hablar públicamente con Javier Lozano, quien previamente había intervenido en el noticiario de López-Dóriga para exponer sus puntos de vista sobre el intercambio epistolar que sostuvo con el jefe de Gobierno, no obstante, dijo que sí aceptaría hacerlo con Felipe Calderón.
"Yo estoy en la mejor disposición de dialogar con su jefe (de Lozano), si se trata un asunto de diferencias entre los dos gobiernos", repuso Ebrard. ¿Sí dialogarías con su jefe, con el Presidente?, preguntó, incrédulo, el periodista, sabedor de que Marcelo no reconoce a Calderón. "(Para) debatir este tema, ¿no?", repuso.
El espacio que le dio Joaquín, Lozano lo aprovechó para balconear la carta que le envió Marcelo Ebrard, la noche del jueves, la cual, según dijo, recibió hasta ayer a las once y media de la mañana. "Le conté 35 faltas de ortografía", reveló el titular de la STyPS.
Un halo de misterio envuelve la renuncia del oficial mayor de la Semarnat, Hugo Eric Flores Cervantes. Nadie sabe, nadie supo. El caso es que este hombre, cuyo nombramiento fue hecho desde Los Pinos, confirmó que dejará el cargo en los próximos días. Lo que sí sabemos es que no fue renuncia voluntaria.
Moraleja de la semana (dedicada a Hugo Sánchez): Más pronto cae un hablador…

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