Evaluación.

Este domingo se cumplen 21 meses del periodo sexenal para el que fue electo Felipe Calderón. Roy Campos, de Consulta Mitosfky, subirá este fin de semana a su página de Internet la evaluación de gobierno en el séptimo trimestre, periodo en el que imperó la violencia generalizada y ocurrió el caso del secuestro y asesinato de Fernando Martí. Fueron tres meses en que los precios continuaron arriba de lo esperado y se mantuvo el debate petrolero.

“La opinión sobre la mayoría de las variables se deterioró; sin embargo, el presidente se mantiene en muy buenos niveles (de aceptación) Mi hipótesis es que los ciudadanos no están culpando al presidente de todo lo que pasa, y por el momento le están reconociendo el trabajo, aunque no se vean resultados”, apunta Roy, en una nota dirigida a este reportero, en la que sintetiza el contenido de la evaluación.

El presidente Calderón logra el 58.8 de aprobación ciudadana. Este valor, si bien no es su peor aprobación, si lo mantiene abajo del 66 por ciento que lograba un año antes, y del 60 por ciento del que no bajó durante todo el primer semestre del 2008.

Mitofsky compara la evaluación obtenida por los últimos cuatro presidentes de México. Vemos que Calderón solo es superado por Carlos Salinas de Gortari (70.9 por ciento.) Vicente Fox le pisa los talones (56.7 por ciento) y muy atrás queda Ernesto Zedillo (46.7 por ciento)

Mitofsky deja claro que la percepción económica continúa su deterioro. El 76 por ciento de los mexicanos la perciben de manera negativa. “Este es el peor resultado en los meses de agosto en lo que va del siglo”, puntualiza la evaluación.
A pesar de que durante agosto el tema principal ha sido la inseguridad y la poca capacidad para combatirla, en los ciudadanos predomina la preocupación por los temas económicos. La crisis económica es percibida como el mayor problema por el 26.5 por ciento de los ciudadanos, contra el 24.9 hace un año. La inseguridad viene en segundo lugar con el 16.2 por ciento; desempleo en tercero, 14.1 por ciento, pobreza, cuarto, 11.8 por ciento y narcotráfico, quinto, 7.4 por ciento.
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Llegó la hora. Todos a la calle a manifestar nuestra indignación por la incompetencia de las autoridades, en los tres niveles de gobierno, para asegurar un piso de seguridad a los ciudadanos. En 55 ciudades de la República, y media docena en el extranjero, los ciudadanos de este país, cuya violencia se equipara con los que están en guerra, marcharán para iluminar México.

Los que lo quieren oscurecer son los partidarios de Andrés Manuel López Obrador. Sin el menor rubor promueven la caída del presidente Felipe Calderón. El zigzagueante Porfirio Muñoz Ledo, quien ha servido tanto al PRI, como al PAN; como al PRD y al legitimo, es uno de los generales de esta batalla de la vergüenza, que pretende un clima de desestabilización.

Hay que ver lo que declara el famoso Porfis sobre la revocación del mandato de Calderón. En Reporte Indigo, el periódico electrónico que dirige Ramón Alberto Garza, habla como un verdadero golpista. “Un presidente no tiene porque durar seis años. Todos los regimenes del mundo tienen forma de revocarlo. No debe Felipe Calderón durar hasta el 2012. No tiene poder, no tiene legitimidad, está en manos del chupacabras”, dijo.

Y tan brillante que era…
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Carlos Navarrete reviro ayer al calificativo “lo chamaquearon” empleado por Ricardo Monreal para destacar la ingenuidad del coordinador parlamentario del PRD en el Senado.

“De las expresiones de algún compañero mío, sólo puedo decir que lo lamento mucho. Yo esperaba de todos mis senadores, y especialmente de mi vicecoordinador, una expresión de solidaridad elemental frente a un acuerdo, pero está visto que Ricardo Monreal es genio y figura hasta la sepultura. Así es Ricardo y así seguirá siendo”, declaró.
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Charlamos brevemente con Dante Delgado, coordinador de Convergencia en la Cámara de Senadores. Queríamos saber que tan radical viene el plan de acción que Andrés Manuel López Obrador anunciara el 15 de septiembre en el Zócalo. El veracruzano casi nos dice que en el FAP son puro amor y paz. “Estamos por le diálogo y la concordia” , puntualizó. El ex gobernador de jura que no habrá ningún problema ni en las calles, ni en el Congreso, mientras el PRI honre su compromiso de no privatizar PEMEX.

Delgado aprovechó la charla para hacerle un comercial a Luís Walton, candidato de Convergencia a la alcaldía de Acapulco. Las encuestas indican que al eterno aspirante al ayuntamiento del puerto le viene su mejor oportunidad para hacer realidad su sueño de ser presidente municipal. “Vamos a demostrar que las otras dos fuerzas del FAP podemos derrotar a la candidata del gobernador en una elección de estado”, puntualizó.