Amarga pesadilla.

La medicina es amarga, dura, intragable. No hay duda que impactará severamente en el ánimo nacional. Hay que cubrir el boquete de 300 mil millones de pesos que se estima tendrán las finanzas públicas para el 2010. Severos ajustes al gasto, un déficit de medio punto del PIB (o sea, mas deuda) y sobre todo, nuevos impuestos en época de crisis, de recesión. Más IVA, más ISR, más IDE, más IEPS.

En San Lázaro nos aseveran que el palo a los contribuyentes ya está planchado con la cúpula del PRI. Habrá que ver como reaccionan los diputados de infantería, los de base, los que tienen que ir a explicar las medidas en sus distritos, los que reciben los tomatazos.

Apenas hace unos días los partidos de oposición en las cámaras aseguraban categóricos que no admitirán más impuestos, pero el tono de los priistas de la burbuja ya no era tan firme el día de ayer. Saben que el gobierno federal y los panistas levantarán el índice hacia la numerosa bancada del tricolor –237 diputados-- en caso de que no se apruebe el doloroso paquete del Ejecutivo.

Hay dos puntos de incremento al IVA. En lugar del 15 por ciento, pagaremos el 17 por ciento en todo lo que consumamos. El gobierno federal disfraza en forma astuta este impuesto como contribución para el combate a la pobreza. ¿Cómo podrán oponerse priistas y perredistas a la solidaridad con 40 millones de mexicanos que padecen algún tipo de pobreza y con 14 millones que padecen pobreza alimentaria, según cifras de Agustín Cartens?

Alimentos y medicinas pagarán también un 2 por ciento de impuesto generalizado. ¿Lo aceptará el PRI que tiene en sus estatutos la prohibición expresa de quitar el IVA tasa cero en estos dos rubros? “No es IVA, es un impuesto especial”, justificó el diputado tricolor, David Penchyna, en el programa Fórmula Financiera de Radio Fórmula. ¿De veras creerá que sus compañeros se van a tragar el engaño? El hidalguense, por cierto, se dedicó a destacar las bondades del paquetazo

El ISR sube temporalmente del 28 al 30 por ciento. En el 2012 volverá a su nivel actual. El Impuesto a Depósitos en Efectivo se incrementa del dos al tres por ciento y se cobrará a partir de 15 mil pesos, en lugar de 25 mil pesos. Así, los informales tendrán que ponerse con su cuerno. Los celulares, el Internet, las cervezas, el tabaco, juegos y sorteos… van también para arriba.

¿Y que pasara con los burócratas –no hablamos de subsecretarios o directores-- que trabajan en Turismo, en la Secretaría de Reforma Agraria, en la Función Pública? “Tendrán las compensaciones que marca la Ley; becas para que estudien y puedan reinsertarse en el mercado laboral”, dijo Cartens. ¿En un mercado laboral con una economía en recesión? Ajá…

El paquete económico para el 2010 apenas llegó al Congreso. Los legisladores tendrán dos largos meses para discutirlo, negociarlo, cambiarlo. La experiencia nos dice que habrá enérgicas resistencias y que seguramente ajustarán a la baja su parte recaudatoria. No vemos como vaya a transitar el impuesto a medicinas y alimentos. A menos que…

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Lo dijo Arturo Chávez Chávez ante senadores del PAN. Al amparo de la tesis del asesino en serie, se cometieron en Ciudad Juárez múltiples feminicidios pasionales, por venganza u otras causas. El próximo titular de la PGR, si el Senado no decide otra cosa, se declaró convencido de que cumplió con su trabajo como Procurador de Justicia de Chihuahua en el gobierno de Pancho Barrio, en las épocas más negras de las muertas de Juárez. Dijo que se libraron más de cincuenta órdenes de aprehensión y hasta presumió la captura de Andel Latif, mejor conocido como “El Egipcio”.

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La LXI Legislatura en la Cámara de Diputados se estrenará el próximo lunes en el ejercicio de las comparecencias por la Glosa del Informe. El primer secretario de estado que irá al pleno es Fernando Gómez Mont, titular de Gobernación. La comparecencia que mayores expectativas levanta, obvio, es la de Agustín Carstens

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Juanito no cumplirá con la palabra que empeñó en aquel publicitado mitin en el que Andrés Manuel López Obrador le advirtió que no se la fuera creer, y lo hizo comprometerse a entregar la delegación a Clara Brugada, en caso de triunfo. Decidió quedarse y que le hagan como quieran.

Este hombre, emblema de la pobreza política que vivimos, declaró ayer a los reporteros que lo acompañaron a la Basílica de Guadalupe que va a gobernar Iztapalapa los próximos tres años. ¿Y Brugada? “Ella quedará en una dirección”, puntualizó.

Vemos muy difícil, sin embargo, que cumpla sus propósitos. Rafael Acosta no podrá ni entrar a las oficinas de la delegación. Sus engañados ex compañeros obradoristas le darán una sopa de su propio chocolate, que se merece, por farsante.