Nos vemos en 2010

Integrantes de diversos frentes radicales han tenido media docena de reuniones con el objetivo de integrar un movimiento armado que se haga presente en 2010, año del bicentenario de la Independencia y del centenario de la Revolución. Cada uno de estos grupos no pasa de 200 personas y sus intentos de “articularse” no han tenido éxito, según revelan reportes de inteligencia que plasman el resultado de meses de investigación.

La carga simbólica de ese doble aniversario ha alentado a estos “frentes” —así los denominan— a escribir en bardas, mantas, pancartas o cualquier cosa que sirva de pizarrón, la amenazadora frase: “Nos vemos en el 2010”. Lo mismo en el industrioso norte que en el contrastante centro o el empobrecido sur de México.

La imposibilidad para articularse mostrada por los radicales, aunada al raquítico número de sus integrantes, mantiene con cierta tranquilidad a las autoridades mexicanas. No ven por ningún lado las condiciones para conformar con éxito un movimiento de esa naturaleza.

No bajan la guardia, sin embargo, frente a lo que pueda hacer el año que viene el Ejército Popular Revolucionario. La guerrilla eperrista ya ha mostrado el daño que puede hacer, cuando se lo propone Allí está, como ejemplo, la voladura de los ductos de Pemex, en protesta por la desaparición de dos de sus dirigentes en Oaxaca. Los daños económicos fueron millonarios.

Hay un sector de la población que sí preocupa por su volatilidad: los jóvenes. Inteligencia advierte sobre la necesidad de evitar motivos que nos lleven a una revuelta estudiantil. Recomienda, particularmente, no elevar las cuotas del transporte, un tema sensible para los muchachos. Advierte que el manejo represivo de un conflicto de esa naturaleza podría ser la chispa para una revuelta mayor.

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El área jurídica de la Cámara baja analiza la validez de la carta que Julio César Godoy, medio hermano del gobernador de Michoacán, envió a la Mesa Directiva de ese órgano legislativo, para rendir protesta por escrito como diputado del Partido de la Revolución Democrática.

El tema resulta medular. Si la protesta es válida, Godoy gozaría de la protección que el fuero otorga a los legisladores. El perredista tiene orden de aprehensión por supuestas complicidades con el cártel michoacano de La Familia. Pudimos averiguar, sin embargo, que el dictamen que elabora la Cámara viene en contra de Julio César.

El gobernador de Michoacán afirma que las pruebas de la Procuraduría para solicitar a los jueces la orden de aprehensión en contra de su medio hermano no son sino “dichos” de testigos protegidos. Las fuentes consultadas aseguran, sin embargo, que hay comprometedoras grabaciones de conversaciones que Julio César habría sostenido con capos del cártel. El padre de los Godoy y el de La Tuta habrían sido muy cercanos, nos dicen.

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Alejandro Werner, subsecretario de Hacienda; José Antonio Meade, de Ingresos, y Dionisio Pérez Jácome, de Egresos, intentarán, este viernes, hacer realidad un sueño imposible: convencer a la numerosa bancada del PRI —237 diputados—de las bondades del paquete económico del Ejecutivo para 2010.

A los diputados tricolores les da urticaria cuando se les habla de aprobar el famoso impuesto de 2% para combatir la pobreza; mucho más si se cobra a medicinas y alimentos. La mayoría coincide en que es un “IVA disfrazado”.

Los priistas, además, dieron a conocer un documento que contiene las conclusiones de la “detallada revisión” de las iniciativas enviadas por el Ejecutivo. Uno de los párrafos iniciales dice que la creación y elevación de impuestos que propone el Presidente de la República “ahondará la más grave recesión económica que nuestro país ha sufrido en décadas.” Auguramos que la labor de convencimiento de los subsecretarios no servirá de mucho.