Desafío a los ayatolas.

A una que se le va a armar con los ayatolas amarillos es a la valiente diputada perredista Ruth Zavaleta. La presidenta de la mesa directiva de la Cámara de Diputados adelantó ayer a embajadores y cónsules mexicanos, reunidos a puerta cerrada en la cancillería, que el Congreso de la Unión abrirá este año el debate sobre la reforma energética.

“En el sector energético –dijo al cuerpo diplomático--escucharán ustedes muchas noticias en corto. Seguramente en este rubro se buscará, en el Congreso General, arribar a una reforma energética que haga posible que este sector pueda financiar mayores volúmenes de inversión.”

Y esto, agregó la perredista, “para poder ampliar su infraestructura y responder a la dinámica de la demanda, buscando potenciar las fuentes de financiamiento interno y sanear su situación financiera, sin vulnerar la soberanía de nuestro país.”

Nada tendrían de particular estas palabras si no fuera porque salieron de la boca de una perredista -¿la escuchaste Fernández Noroña?-- y que en México la reforma energética es aún tema tabú. Sabemos, por amigos perredistas, que Andrés Manuel López Obrador volcará todo el capital político que le queda para evitar la aprobación de la citada reforma. “Es lo único que le importa”, nos aseguran.

Ayer mismo, integrantes de la cúpula del PRD, incluído Jesús Ortega, aspirante de la moderada Corriente Nueva Izquierda a la presidencia de su partido, manifestaron públicamente que no permitirán la privatización de PEMEX. Adelantaron también que intentaran construir una mayoría parlamentaria, para evitar la aprobación de la reforma energética.

El tema se mueve en el Congreso. El panista Santiago Creel, presidente del Senado, les dio idéntico mensaje a embajadores y cónsules mexicanos: Vamos por la reforma energética. ¿Usted cree que los presidentes de las dos cámaras hicieron esa declaración para que los diplomáticos mexicanos mantengan absoluta reserva sobre el tema? Nosotros no.
La reforma energética podría ser discutida en el próximo periodo de sesiones del Congreso, que inicia el 1 de febrero. Por lo menos es lo que declararon ayer los senadores Francisco Labastida Ochoa, PRI, y Juan Bueno Torio, PAN. El 15 de enero próximo se reunirán los integrantes de la Comisión de Energía del Senado para discutir propuestas. El tema va a sacar chispas. Ya lo verán.
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Los integrantes de la redacción de noticieros de la W fueron convocados ayer a un encuentro con los directivos de la estación. La empresa quería dar su versión de sobre la salida de Carmen Aristegui del noticiero Hoy por Hoy.

Nos cuentan que los representantes de la empresa explicaron que durante cinco años la emisora ha perdido mucho dinero, algo así como 30 millones de pesos, y que esa situación no se podía prolongar. Utilizaron cifras que proyectaron en una pantalla para demostrar que el espacio de la conductora estrella trabajaba también con números rojos, a pesar de una alta audiencia.

¿La razón? Dicen que Aristegui no respetaba la disciplina comercial; ni los cortes, ni el manejo del reloj. Manejaba a su libre albedrío las cuatro horas que duraba su espacio, lo que complicaba la contratación de anuncios. “Hacía lo que quería”, sintetizó un directivo.

En la W explican que en una estrategia de crecimiento, es imposible tener éxito con números rojos, ni revertir las pérdidas, sin orden en el manejo de los cortes. “No puedes resolver el problema, si en el espacio más importante no tienes el respaldo, ni la disciplina comercial que se requiere”, subrayan.

Juran que hicieron esfuerzos por llegar a un acuerdo con Aristégui para que Hoy por Hoy se manejara de manera mas ordenada, pero aseguran que la prestigiada conductora no aceptó someterse a la famosa “disciplina comercial”.

En forma tajante niegan que haya habido un plan preconcebido para sacarla del aire por motivos vinculados con los temas incómodos que trataba al aire. “Hasta el final buscamos un arreglo, tan es así que no tenemos un conductor de relevo”, aseveran. Rafael Arce, conductor que la reemplaza desde el pasado lunes, permanecerá al frente de ese espacio, mientras encuentran a la “persona adecuada.”

El tema ha cobrado visos de escándalo nacional. La senadora Yeidckol Polevnsky, subirá hoy el tema a la tribuna de la Comisión Permanente. En un punto de acuerdo que someterá al pleno propone que se haga un amplio reconocimiento a la labor periodística de Aristegui, y pide a la empresa una explicación clara de los motivos por los que no se renovó el contrato a la conductora. “Tenemos todas las pautas para afirmar que su salida tiene que ver con la postura que asumió frente a la reforma electoral”, afirma Polevnsky.