La irritación de Encinas

“¡Yo no mando mensajes, hablé personalmente con él, pero no para pedirle que se retirara!”, soltó Alejandro Encinas, del otro lado de la línea. El tono era de irritación, de desaliento, de impotencia ante lo consumado. Y es que el coordinador de la bancada del PRD en San Lázaro no acaba de digerir lo publicado ayer en este espacio.

Leer la noticia de que envió a los diputados Agustín Guerrero y José Narro a pedirle a Martín Esparza que abandonara el Palacio Legislativo, después del segundo receso en la abortada comparecencia de Javier Lozano, le dolió profundamente. “Es absurdo, nosotros promovimos el ingreso de Martín”, aseveró.

El ex jefe de Gobierno del DF, uno de los hombres más visibles del movimiento obradorista, jura que Gerardo Fernández Noroña, fuente de la información publicada, miente. “Hablé por teléfono con él (Esparza) para decirle: esto ya tronó, y comentarle que el PAN había buscado por todos los medios reventar la sesión”, afirmó Encinas.

Buscamos a Noroña para comentarle el desmentido. El aguerrido petista, a quien se le puede acusar de todo, menos de ser un mentiroso, sostuvo sus palabras. “Me lo dijo el propio Esparza. Cometí una infidencia; a lo mejor es un error mío. Pero de que me lo dijo, me lo dijo…”, puntualizó. El petista hizo la siguiente reflexión: si Encinas no mandó el mensaje, entonces Guerrero y Narro se tomaron atribuciones que no les corresponden.

Gerardo sintetiza con dos palabras la reacción de Alejandro: “Está encabronado”. Y de paso recuerda que el jefe de la bancada perredista en San Lázaro votó a favor de la Ley de Ingresos. Lamenta también que este asunto los vaya a enfrentar. “Siempre he sido solidario con Encinas. Si alguien se la rifó por él, soy yo…”

A Javier Lozano le parece “irracional” lo sucedido en la Cámara de Diputados. En su entorno ha manifestado que nunca había asistido a un espectáculo como el que sufrió el pasado jueves. Por lo pronto, no tiene la menor intención de regresar al Palacio Legislativo a reponer la abortada comparecencia, como pretende la oposición.

Ya tuvo suficiente con los insultos, manoteos, descalificaciones que escuchó por más de una hora. “No soy su burla”, habría comentado el secretario del Trabajo a sus colaboradores. El hombre dijo también que ese día se dio cuenta hasta dónde es capaz de aguantar, sin perder el control.

Paco Rojas va a tener que trabajar horas extra para contener la indignación que produjo en los diputados del PRI la anunciada intención de los senadores de rebotar la Ley de Ingresos, sin el punto adicional de IVA y sin retroactividad en el régimen compensatorio. No entienden lo que sucede, pues a lo largo de las negociaciones, dicen, se trabajó “en conferencia” con la Cámara alta.

Están particularmente furiosos con el beltronista Manuel Añorve, alcalde de Acapulco, quien declaró públicamente que “los diputados se equivocaron”. La oaxaqueña Sofía Castro, una de las más irritadas, por poco pide una declaración de guerra contra Manlio Fabio Beltrones. Otros que han manifestado su inconformidad son Roberto Albores, Chiapas, y Jesús Hernández, Nuevo León.

Abel Hernández, nuevo coordinador de comunicación social del CEN, nos llamó para compartir “algunas reflexiones” en el interior del CEN, derivadas de la tormenta que se desató por las declaraciones de Nava, en el sentido de que el PRI no les había dejado opción en la Ley de Ingresos. “El PAN no elude su responsabilidad en la aprobación de la Ley de Ingresos, aunque originalmente apostamos por la iniciativa del Ejecutivo. Era la mejor”, dijo.

No hay comentarios.: